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| Tomado de Internet |
La Alcaldía de Cali rindió un homenaje a los jugadores de la Selección Colombia con motivo de su actuación sobresaliente en el Mundial de Fútbol 2014 celebrado en Brasil.
La Administración Municipal otorgó medallas al Mérito Cívico Santiago de Cali a los siete jugadores de esta ciudad: Faryd Mondragón, Mario Alberto Yepes, Cristian Zapata, Pablo Armero,
Adrián Ramos, Carlos Valdés y Abel Aguilar, así como a Eduardo Niño,
entrenador de arqueros y Héctor Fabio Abadía, utilero del seleccionado
colombiano. La imposición de dichas medallas, según se anunció, estaría a cargo de los niños del Centro de Formación e Iniciación Deportiva, aunque otros los reemplazaron.
Una condecoración es el reconocimiento de
un territorio o una entidad a una persona que por sus actos merece el honor. La distinción debe ser impuesta por quien tiene la representación del otorgante o
su delegado, pero éste debe tener una posición similar a la del delegante. Los niños podrían ejercer de Testigos de Honor, por ejemplo. En un acto oficial multitudinario es
cuando más importancia tiene que se reconozca o se identifique quién es el representante
o autoridad de la región.
También, es necesario que esos actos sean ejemplo de disciplina, hoy más que nunca esencial para poder avanzar en el desarrollo. La disciplina es la razón del progreso de los países desarrollados.
En Colombia no podemos seguir confundiendo el populismo con el desorden, como ocurrió en la Plazoleta Jairo Varela en el reconocimiento a los jugadores por su comportamiento ejemplar y disciplinado en el Mundial de Fútbol. El desorden no solo desacredita a quien otorga el reconocimiento, también desluce a quien lo recibe.
