Placa en la estación Cañaveralejo del Mio

Placa en la estación del  Mio  Cable

 Esta  placa es un excelente ejemplo de lo que no se  debe hacer en manejo de  escudos, logosímbolos,  textos y orden.

1.  El Ministerio de Transporte se identifica con un logosímbolo publicitario que más significa para una empresa privada que para una entidad  del Estado.  Debería ir el  escudo de Colombia.

2. El escudo de  Cali, al  mismo nivel que el famoso  corazón de " nuevo latir" del  alcalde Ospina.  El corazón que  "contaminó" absolutamente  cuanta  pieza efímera o fija se hiciera, según asesoría irresponsable  del  publicista contratado desde la campaña  política  del Alcalde.

3. Un ridículo "doctor" puesto separado del  nombre  de los  personajes y estos  por encima de sus cargos, como  si la inauguración la hiciera un ciudadano del común y no el Alcalde.

Podría ser más extenso el análisis, pero  basta con lo anterior.

Módulo en el hall del  Mio Cable

Un  módulo que tiene en el  extremo inferior derecho un sutil "corazón del nuevo latir".  Es  decir, aunque ese gobierno ya pasó, la pieza quedó "amarrada" para que se sepa  que se hizo en el gobierno del alcalde Ospina.  Un  cambio,  no solo en esta  pieza sino en las muchas que hay en toda la ciudad,  significaría un gasto enorme para la Administración Municipal.

Por ejemplos como  estos  es que se insiste en que lo único que debe ir en cualquier soporte de un gobierno, es  el  escudo del  municipio,  del departamento o de la nación.  Pero los publicistas ganan y como nunca se debaten estos temas  al interior de las  administraciones  con alguien que sí sepa de protocolo o semiótica, he ahí los resultados: en estos momentos, Cali, una  ciudad llena de corazones por todas partes, vallas, avisos, papelería, etc.